Blogia
La bruja de Salem

Fantasmagótika

Ya está decidido: cuando me muera (cosa que espero que pase dentro de muchos años y, si no es mucho pedir, de placer...) voy a ser un espíritu malvado de estos que van pululando por el mundo jodiendo a diestro y siniestro. Nada de un alma pura y dulce que ascienda al Cielo por una escalera blanca con destellos dorados y flores volando, no, quiero pasar mis días como alma despegada del cuerpo aquí, errante, recorriendo todos los caminos que, por diversas razones, no pude recorrer en vida. Cuando ya los haya recorrido me meteré de okupa en la casa donde pasé la mayor parte de mi vida y daré por saco hasta que sus pobres habitantes tengan que salir pitando.

Está demostrado que los fantasmas existen, así que mi "plan de futuro" no es tan descabellado como parece (que lo es, pero no quiero acabar con mis ilusiones, por muy absurdas que sean).

Bueno, también podría pasar que antes de morirme llegara el Anticristo y con él toda una horda de criaturas demoníacas y malvadas a las que (sin dudarlo) me uniría, con lo que obtendría la vida eterna en el siempre llameante Infierno.

Sea lo que sea, ya llegará...

PD: no te preocupes, no me he dado un golpe en la cabeza ni se ha vuelto reversible la experiencia traumática que tuve cuando leí Los renglones torcidos de Dios, no, es que estoy malita y me duele muchísimo la cabeza; tal vez sea la fiebre...

1 comentario

E -

Vale, gracias por la PD, lo achaco a la fiebre xD·