Titititiiiii...
- Buenas noches, señores telespectadores, y bienvenidos una vez más a El diario, el programa en el que son ustedes los que nos cuentan sus historias. Hoy tendremos en el plató a Bru, ¡adelante!
La presentadora se sienta en un sofá con una pose poco natural y mira hacia las puertas correderas. De repente se abren y comienza a salir humo, y detrás de él surge una pobre chica tosiendo sin parar. Ésta se sienta medio mareada en un taburete. Las cámaras inciden sobre ella de forma acusadora.
- Bien, Bru, adelante, puedes comenzar con tu historia.
Bru siente que sus orejas se ponen rojas.
- Vale... Esto... Mejor empiezo desde el principio. Una de mis mejores amigas está saliendo con un estudiante de 3º de Derecho. Un tío majo, aunque muy (muy muy muy) facha. Pero, a pesar de nuestras diferencias, siempre nos hemos llevado bien. Hasta ahora. Desde que ella le ha contado que soy bollera me evita, no me habla, no me mira e incluso parece que teme acercarse a darme dos besos al despedirse por si le pego algo.
- Pero Bru, eso que dices no puede ser... A ver si es que te mola su novia y él sólo intenta protegerla de las garras de una pervertida...
- ¡Que no, coñeee! Y bueno, la escenita de hoy ha sido alucinante. Antes discutíamos durante horas (de buenas, me encanta discutir), y ahora sólo me mira de reojo, de arriba a abajo, como preguntándose qué habrá sido eso que he comido en mal estado.
- ¿Y qué ha sido? Porque lo de que te encanta discutir es más grave todavía...
- Pero... ¿qué? ¡Hija de piiiiiiiii! ¡Malnacida! ¡Eres una piiiiiiii hija de tu piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii! ¡Me piiiiiiiiiiiiiii en todo!
-¡Publicidad! ¡Publicidad!
Tititiiiii...